Esta escultura de hierro y piedra de más de ocho metros de altura fue construida en el año 1976 para homenajear la prolifera industria que, por aquel entonces, había en esta zona minera. Fue una de las primeras fuentes en la villa guardense realizada con piezas procedentes de la minería y de la industria local. Está esculpida con figuras de labradores y alfareros, en representación a los sectores económicos e industriales de la localidad durante los años 70.
Su aspecto estilizado la hace resaltar sobre el conjunto que la rodea. También es conocida como “La Fuente de la Espiga” y cuenta con una placa conmemorativa en agradecimiento al alcalde que en su día tuviera Guardo.
En al año 2011 fue remodelada por completo, convirtiéndose en un especial atractivo para los visitantes y guardenses. Se ha convertido en una plaza totalmente renovada, más diáfana facilitando con ello el acceso a la población. En su parte central tiene una fuente con bancos alrededor.
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Vista de la estructura de hierro y piedra del monumento con escudo de Guardo. |
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Vista completa de la plaza que contiene el Monumento a Guardo. |
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Vista Completa del Monumento a Guardo y la Fuente de la Espiga.
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Figuras talladas en hierro con motivos mineros. |
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Vista de tallas en piedra con motivos de alfarería y labradores. |
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Chorros de agua procedentes de la fuente. |
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Placa conmemorativa, en agradecimiento al alcalde, ubicada en el monumento. |